Laura no olvidaría nunca los días pasados en Verdeluna, en los que despertó al amor, a los sentimientos contradictorios y a la hermosa sensación de la vida como aventura.
Después de descubrir el secreto del monte, a Lucía y Marcos un terrible acontecimiento les separa; pero una buena amistad hace que broten sentimientos olvidados.
La arquilla de la que nunca se separa Alba es muy misteriosa y nadie sabe qué guarda en su interior. Se la había regalado su madre, insistiéndole en que siempre fuera con ella. Así que se la llevó a casa de sus primos...