Rayuela. 50 Edición conmemorativa

La primera vez que leí Rayuela tenía 16 años. Obviamente, me faltaba formación y experiencia para aprehender todo lo que Cortázar quería transmitir con esta "antinovela". Pero algo en la pluma del autor me hacía volver una y otra vez a sus obras. El Cronopio Mayor me había conquistado. Hoy, mucho tiempo más tarde -110 años exactos después de su nacimiento; 61desde la publicación de Rayuela; y a 40 de su temprana muerte- me atrevo a decir que esta es una lectura obligatoria para todo aquel que quiera conocer los orígenes del boom de la narrativa latinoamericana. Ningún autor ha sido jamás más honesto y generoso con sus lectores. En Rayuela, encontramos no solo las motivaciones de Cortázar para llevar a cabo su revolución estética, sino también todas las inquietudes que acosan al ser humano contemporáneo.  Es una obra que admite infinitas lecturas e interpretaciones. Quien quiera una novela más o menos tradicional puede limitarse a leer los 56 primeros capítulos, como señala el propio autor. El lector más exigente optará, sin embargo, por seguir el plan propuesto por Cortázar en el tablero de dirección con el que inicia su novela: empezar por el capítulo 73 y acabar en el 131 tras haber leído el total de 155 capítulos de la obra (incluyendo los que el autor califica de "prescindibles"). El resultado será una auténtica odisea lectora. Unas veces nos percataremos de un cierto hiperintelectualismo; otras, de un exceso de experimentalismo; en ocasiones, sentiremos un puñetazo en el estómago. Siempre, un acuciante deleite por el ingenio, el humor y el swing de la prosa de Cortázar. En definitiva: el viaje merece la pena. No en vano decía García Márquez que si algo era capaz de despertar Cortázar era devoción. Y eso es, ni más ni menos, lo que Rayuela despertó en mí hace ya tantos años: auténtica devoción por el maestro Cortázar. ¡Ave, Cronopio Mayor!

Es un clásico de Julio Cortázar. Un libro para leer muchas veces. Me ha gustado mucho. Ya lo había leído en eBook pero se degusta más en papel.

Es un regalo para alguien que llevaba tiempo esperando por esta lectura. Según su opinión, es un "regalazo".