Cuando ellas fueron dragones

Desde la primera vez que leí la Sinopsis de este libro, supe que era una lectura hecha para mí… y no me equivoqué! Madre mía que libro tan increíble. Entiendo que no será del gusto de todo el mundo, pues aquí encontramos el relato de un hecho histórico (ficticio) narrado en primera persona por nuestra protagonista. Y simplemente es eso, una persona contando cómo vivió este hecho antes, durante y después. Alex no ha tenido una vida fácil. Ha sido educada para ser buena, obediente, sumisa, no hacer preguntas y mirar al suelo cuando se lo dicen. Pero ella quiere más… Alex quiere estudiar, ser universitaria igual que su madre. Sin embargo, su madre a pesar de ser una estudiante brillante y destacar por sus notas por encima de cualquier persona, era mujer. Y una mujer es esposa, tiene hijos y cuida de la casa. Una crítica brutal al hetero patriarcado instaurado (en este caso) en Estados Unidos de los años 50. Pero, tras la dragonización masiva el 25 de abril 1955 todo cambia. Miles de mujeres transformadas en dragonas a lo largo de todo el país. Miles de mujeres arrasando con edificios, maridos infieles o maltratadores, jefes acosadores, profesores abusadores, políticos corruptos. Unos hechos silenciados por el gobierno y penado para toda aquella persona que quiera estudiar este hecho increíble, ya sean científicos, periodistas, políticos o profesores. Un acontecimiento que se convierte en un tabú, como hablar de la menstruación o la educación sexual. Alex me ha resultado una persona crispante en muchas ocasiones. Pero no se le puede reprochar, y es que ha sido educada para no intentar entender. Tan solo vive sumisa y, en ocasiones, vuelca su ira o enfado en las personas que no lo merecen. No podemos olvidar durante esta lectura, que es una adolescente privada de muchas libertades y que sufrirá injusticias que no podemos ni imaginar. En este libro encontramos sororidad, compañerismo, prejuicios, una mujer mecánica y admirada, LGTBI, violencia de género, abandono, empoderamiento, coraje y mucha fuerza. Una fábula con una visión feminista y llena de mujeres increíbles que lucharán por ser aceptadas tal y como son. Una lectura imprescindible para mí y que me ha fascinado hasta la última página.