Los alquimistas convertían el plomo en oro. Y Bennett-Goleman nos recuerda que, igual que ellos, todos podemos transformar los momentos de confusión o dolor emocional en instantes de claridad.
Los alquimistas convertían el plomo en oro. Y Bennett-Goleman nos recuerda que, igual que ellos, todos podemos transformar los momentos de confusión o dolor emocional en instantes de claridad.
En esta obra inteligente y sugestiva, la reconocida escritora nos propone nuevas maneras de emanciparnos de las costumbres dañinas y encontrar una genuina libertad emocional.