Lapvona

Mi libro favorito de 2023. Grotesco e incómodo. Cruda descripción de una realidad medieval horrible pero que recuerda al 2020. El personaje del rey merece una novela propia. Si te gustó Crimen y Castigo, Lapvona te deja la misma sensación

Una aldea medieval, un chico deforme (Marek), su padre (Jude) y una anciana virtuosa (Ina), forman parte del elenco principal de personajes de esta peculiar novela. Está dividida en cuatro grandes partes correspondiendo cada una a las estaciones del año (cinco si tenemos en cuenta que la última vuelve a ser la primavera), y es cuando hace acto de presencia el verano con sus altas temperaturas y la severa sequía que asola a sus habitantes cuando todo se tuerce, haciendo que algunos recurran a medidas desesperadas para poder sobrevivir. Como es lógico, esta sequía no les afectará a todos por igual; Villiam será inmune a ella, el señor feudal con poder sobre todas las cosas es el personaje más despreciable de entre todos los que irán apareciendo. Su único aliciente es comer y pasarlo bien. Su gran casa solariega en lo alto de la colina ya indica que es un ser superior. Lo que pase bajo sus dominios poco le importa. La religión será el refugio perfecto para la mayoría. Están aquellos que esperan un milagro para salvar sus vidas y luego están los que actúan de la manera que su instinto les diga en cada momento. Será el más anciano del lugar; Grigor, con sus 64 años, quien poco a poco se irá percatando de la corrupción que inunda y se extiende por el lugar como la peor de las plagas. Según avances en su lectura seguirás sin saber muy bien por donde quiere llevarte, la novela carece de un objetivo claro, pero no puedes hacer otra cosa que leer con premura las barbaridades que acontecen en esa aldea y sus alrededores. Está plagada de situaciones absurdas y es muy incómoda de leer. Pero los que me conocen ya por mis anteriores reseñas, saben que eso es lo que busco; novelas que nos muestren los hechos sin tapujos. Directas y al grano, donde más duele. Que nos remuevan. Hay fragmentos muy desagradables y políticamente muy incorrectos pero qué quieren que les diga, la he disfrutado de principio a fin. La prosa de Ottessa te atrapa y asquea a partes iguales. Además, me gusta la denuncia que hace tanto de la política como de la religión, y su manera tan peculiar de hacerlo. Al fin y al cabo las cosas no son tan distintas hoy en día. 👌🔝 Extremadamente perversa y cruel. Es muy extraña, una mezcla de realismo mágico y drama que me ha mantenido enganchada por seguir leyendo las desgracias de los habitantes de ese pueblo ficticio; Lapvona. Por mi parte no puedo hacer otra cosa que recomendarla.