Lento y salvaje

Para aquellas personas que sean fans de la Banda McEnroe (entre las que me incluyo) la lectura es obligada. Para el resto, es muy recomendable, si nos atrae la prosa sensible, cuasi-lírica que practica siempre Ricardo Lezón, el líder de la banda. Esa prosa que te obliga a detener la lectura, constantemente, para recrearte en la belleza de la construcción de las frases o el juego de palabras insospechadas. Dicho lo cual, en cuanto a su contenido, nos relata de forma muy amena y diáfana, la historia paralela del grupo y de su propia vida personal, pero como advierte el propio autor, la narración no guarda, en apariencia ningún orden, menos aún el cronológico. Nos lleva constantemente de atrás hacia delante en el tiempo, aunque ello no genera, en ningún momento, una sensanción de confusión. En este sentido, durante su lectura me he acordado de aquello que dijera el personaje de Federico Luppi en la inolvidable película Lugares Comunes: "Escribo desde el caos". En fin, si corre algo de sangre por tus venas, te gusta la música, la belleza única de la naturaleza, la auténtica amistad y todo lo que nos aporta, y quieres conocer a un cantante que se desnuda y demuestra sus debilidades de la forma más humilde y sincera, aquí tienes un libro maravilloso. P.D.- El capítulo dedicado a su padre recientemente fallecido (mi pésame desde aquí) me ha retrotraido al fallecimiento de mi padre. Lo he leído varias veces. Primero solo, después a mi mujer, y en todas he llorado. Mismas sensaciones, mismos recuerdos. Gracias Ricardo por verbalizar lo que sufro y siento desde que mi padre nos dejara en 2019. Tras la lectura del capítulo, obviamente, he puesto "un rayo de luz" y el círculo sentimenal ha sido perfecto. Muchas gracias por lo que nos das.

Una autobiografía muy distinta a las demás